Bienvenido aquí escribiré poemas, cuentos cortos y pensamientos al azar, si disfrutas de eso esto te puede gustar.

domingo, 30 de agosto de 2009

NI ETERNO NI MORTAL



No es eterno, no es mortal.
No le he dado importancia estos años,
estos años que se despintan y se tornan incompletos,fugaces.
Veo tus palabras y te veo escribir en mis recuerdos.
A falta de retratos, los días son lluvia sobre tu recuerdo acuarela.
Tus colores se corren por mis piernas y el temor de verte como no eres se cuela por mis poros, engarzándose a uno de mis destinos.
Tu escultura,
obra de mi memoria,
esculpida con lagrimas y besos, despedidas, y recuerdos,
abre el cielo de mis deseos, de mis añoranzas.
Combinando lo mejor de ti, decolorando tus defectos sombríos, que no conozco, que no extraño.
Hasta que voy a ti, y te visito de nuevo. Y entonces te veo. Y sé que no me equivoqué.
Me gustas mucho, siempre me gustaste.
Pero te me vas y yo también me voy de ti.
Esta distancia que nos separa me llena de ansiedad. De duda.
¿Seré para ti, lo que eres para mí?
¿Sientes igual que yo, que algo no está bien, que algo no acabó, que debimos continuar?
¿Sientes ese dolor en el pecho cuando piensas en mi?
¿Ese vacio después de la despedida?
No sé si es a ti a quién extraño, pero estos sentimientos se atoran en mi garganta.
Esos sentimientos que están ahí pero ignoran la forma de salir.
Y que cuando salen lo hacen disfrazados de indiferencia llenándome de culpa por no haberte sido honesto.
Por no haberte dicho que te extraño, que te amé, y que lamento con toda el alma haberme ido de ti.
Que deseo con desesperación saber si te sigo amando igual que ayer, y si tu me sigues amando también. Para entonces poder continuar en solitario o contigo.
No es eterno lo que siento, por que conoceré a alguien y volveré a obcecarme, a enrojecerme los ojos y llenarme los brazos. A probar libertad de pertenecer y de tener y ser para alguien lo mismo. Al igual que tu.
No es mortal, porque no me matará enseguida.
Solamente es algo inconcluso en mi vida. Algo que nació, pero no termino de formarse. Algo que ni muere ni vive. La agonía de la muerte y del nacimiento.
Y aunque no sea eterno ni mortal. Aunque se desvanezca en el papel de nuestra existencia así como carbón en el corazón, y a pesar de que su no existencia nos hiera fuertemente, debemos de una vez decidir.
¿Lo matamos?

lunes, 29 de junio de 2009

ALIENTO EN LOS HUESOS


Aliento constante, entrecortado, busco la mirada de mis huesos, reviso los papeles que abandonaste en el suelo, adivino tu congoja, puedo escuchar los lamentos, ese grillo nocturno que se colaba a la habitación, la gotera aquella que derrumbaba al ritmo de tu pulso.

Espero en tinieblas, tanteo mis huesos en la piel, no es difícil.

La ausencia me aqueja en todos los ángulos, en todas mis siluetas. El dolor es un deleite, dice él mismo. La vida presenta a su mitad, dice que no puede estar sola. Nadie puede estarlo.

Pretendo que no has existido, pero tú me hiciste.

Te fuiste.

Me hiciste y luego te fuiste. Y al irte me obligaste a recrearme, a destruirme y a engendrarme de los escombros.

Te agradezco el dolor. Te agradezco la creación y la destrucción. Y aquella paz que vino después.

Aliento no tan constante. mis huesos han salido. Les digo adiós. Te digo adiós.